miércoles, 9 de enero de 2013

BAJO EL SOL TENDIDO



**© BAJO EL SOL TENDIDO **
Setefilla Almenara Jiménez
(Granada, Julio 2012)



Bajo el sol tendido
de mi tierra petenera
madre, siempre estoy.
Para que, por la cabeza,
me entre el fuego fatuo
que ponga morenas
a las mujeres que no soy.
La carne divina mía
la que pura dijeran
ellos, los hombres
que me han amado.


¿Para qué me hiciera, madre,
callada y bonita
tu teta de amor templado?

 
Las cosas de los machos
yo no las entiendo;
que yo me agarro
a un moreno,
como me agarrara
a un clavo ardiendo.
Adentro de sus párpados
como una red oceánica
tiro mis pupilas
para yacer con ellos,
y de su fiera hombruna,
me espanto.
Ellos para mí, qué guardan
sino la palabra de esparto,
cuánto comprenden
de mi entraña,
en qué lugar les cita
mi alma,
para que hablemos.
Qué dices tú que tienen
para esta hija tuya
en tu nana susurrante
de los paños lavandera.



«Todos los hombres se parecen
niña, el limonero:
penden del nido los limones
se lustran después
y se ponen gualdas,
se arrancan luego al mundo
buscando unos pechos
que les den consuelo»


Pero madre noto un ciclo
de juventud que no termina,
céleres siento rodar sus muslos
por encima de mis costillas;
¿y cómo tengo yo que sujetarlos?
Los brazos, ¿cómo los pongo?
Pero yo los quiero madre
mirar hermosos.
Se doblan sobre sí los hombres,
se recogen en mis tobillos
y achicándose besan mis pies
y los toman entre sus manos.
Se llevan como al tabaco
mi voluntad chiquilla,
y en donde pongo un hombre
los lazos de eternidad
estoy echando. 


¿Para qué me hiciera, madre,
callada y bonita
tu teta de amor templado?

 
Las cosas de los machos
yo no las entiendo.
Pero yo los quiero madre
mirar hermosos.


Déjame tu opinión, gracias.

4 comentarios:

  1. Y cualquier hombre, al menos uno que yo sepa, tras leer esto y hacer todo lo que dices que hace, cosa lógica y humana, no tiene más remedio que releerlo para intentar acercarse a la sensualidad, ternura y quejío que aquí se encierra.

    Adecuada hasta el extremo la comparación de tu mirada con redes de pesca, amiga, ¡¡ay...esos acais!!. ¿De donde sacas esas metáforas, preciosa?. Ah, que se me olvidaba de quien estoy hablando.

    Besazo enorme.

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  2. Tus lecturas, Felipe, es que me encantan. Tratas de interpretar el poema, no basta un ''me ha gustado'', gracias a miles.

    Los piropos que dedicas son disfrutados por la destinataria en su totalidad, que lo sepas(jeje).

    Besos, lindo.

    Sete

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  3. ¿Cómo que no ha llegado esta maravilla a mi escritorio de blogs que sigo? Echándote de menos he vuelto a tu blog y me lo he encontrado.¡Maravilloso! Soy de las que también lo ha leído dos veces. En cada lectura descubro un color nuevo...Lo encajo a mis interpretaciones e interpreta las metáforas de diferentes maneras para ver cuál de ellas me gusta más. Como ves todo un proceso de disfrute y satisfacción al leerte.

    Gracias por uno de los momentos de felicidad plena de este jueves...

    Besos, amiga...

    LOLA

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  4. Hola Lola,

    Pues imagino que no ha salido como actualización del blog porque no es una entrada nueva, sino una que ya existía y que me apetecía tener cerquita, es agradable saber que una es echada de menos, muchas gracias. Niña, me dejas... Plena con un comentario tan alentador como este, y te agradezco además toda la atención que has puesto en el poema. Y si he contribuído a uno de tus momentos de felicidad plena, ya...(sonriendo de oreja a oreja...)

    Te abrazo.



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