miércoles, 8 de mayo de 2013

ESPECULANDO CON LA CUBIERTA


  







Naranjas, naranjos, naranjas...
Desde que concebí el proyecto del libro, me obcequé con una idea. Debía aparecer un naranjo como imagen de portada. Yo quería un naranjo y eso era misa... Todo lo que tenía que hacer era tomar fotos del árbol y posteriormente editarlas, a fin de transformar el aspecto del arbolito en una ilustración poética que representase mi  poemario. Y así, especulando con el potencial de mi idea, incurrí en la obsesión de fotografiar cuantos naranjos me salían al paso. Iba en el autobús interurbano y mi pupila sagaz barría las calles ávida de naranjos... "Ese de ahí está enfermo, no sirve, aquel de allí tiene las naranjas muy menudas, el de más acá no tiene naranjas..." Memorizaba todos los lugares del trayecto en donde había visto naranjos y si alguno era de mi agrado, volvía más tarde para mi sesión fotográfica. Ciertamente el naranjo es un árbol que venero. Tal vez tanta veneración concentrada me hiciera detestarlo...Esta que ves arriba es una de las mil y una fotos que hice al frutal. En la conclusión no hubo hermanamiento, ya digo, todas las composiciones que hacía con las imágenes que había tomado eran afines a manuales de jardinería de los que vende Carrefour...Creo que sobreestimé mi dotes creativas, por lo que, hubo un punto durante el transcurso de la maquetación, en que tuve que despedirme de ese libro ideal de mi cabeza y que tenía una preciosa imagen de naranjos como portada, por supuesto. De esta manera cruel y tajante culminó mi obsesión por las naranjas y los naranjos...Como se puede ver, en la cubierta no aparece ninguno.  Esta fotografía que observas me parece preciosa, no obstante, junto con algunas otras que hice. Debería escribir un libro sobre el cultivo de frutales. La portada ya la tengo, que es mucho...


Déjame tu opinión, gracias.

2 comentarios:

  1. Hay que mirar la parte positiva, has aumentado tu archivo fotográfico en lo que a naranjas se refiere, y además te ha inspirado esta divertida crónica que me ha hecho reír.
    Personalmente, me quedo con la portada actual, ¡dónde va a parar! jeje
    Besitos.

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    Respuestas
    1. ¡Olé mi Esteban!, que no ha permitido que esta crónica autobiográfica del blog, quede huérfana de comentarios...

      (Si es que estás en todo)

      ¿Te he dicho que te envío un besote?

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