**ooo** RETRATO A COLOR DE UNA DAMA **ooo**
a Lola Alcázar
Una de las actividades que más me
gusta hacer es detenerme a observar mi entorno inmediato. Todo
aquello que me rodea y con lo que interactúo. Al aspecto físico
echo un primer vistazo pero, lo mejor de este—llámese
hobby— ocurre a
continuación, cuando intimo con
lo emocional. Hay muchos elementos en el paisaje urbano o
natural que me llevan a lo contemplativo. De ese entorno, comportado
por elementos inertes y personas, referiré a estas últimas, no
obstante. Se me ocurre ahora, que todo el mundo debería también
meditar un tanto acerca de las personas con las que ha elegido
relacionarse. Es un ejercicio muy conveniente, considero,
y de importancia vital. Emplear la conciencia plena en descubrir esos
entresijos de la relación que mantenemos con cada cual. En
principio una pregunta bastaría. ¿Esta persona, qué me aporta?.
Hace unos cuantos años, y poco después
de conocerla , no necesité emplear demasiado tiempo en decirme de
qué carácter era el lazo que me unía a ella, de seguro. Es una
chica preciosa —pensé
de inmediato al verla—
lo era ciertamente. Cabello largo negro, racial, los ojos grandes y
almendrados y que andaban siempre queriendo decir cosas, sus
expresivos ojos decían más que su boca misma, esta, comedida y
sensual resolvía,
armónica, su belleza de señorita mediterránea. Diré también, que
poseía aquella muchacha, un cuerpo atractivo que desplazaba de
elegante innata manera. Lola. Mi bella Lola. La valía de la dama, y
sin embargo, hay que extrapolarla a su interior. Psicóloga de
profesión, valga el dato, pero antes, de vocación; Sus clientes son
gente con suerte sin duda alguna porque opino que, si uno necesita a
un psicoterapeuta ofrecerá más garantías uno que sienta vocación,
pasión, por lo que hace, ¿no es cierto? Como reseña indicativa de
la relación de amistad que nos une a ella y a mí, añadiré algo
curioso; cuando nosotras estamos juntas, seguramente sentadas,
animosas o intimistas, frente a una Coca-Cola, no se averigua en
ella un particular ánimo de docencia y sí de interlocutora
distendida, pese a esto, he podido aprender muchas cosas de Lola,
tanta como es la admiración que le proceso... ¿Qué me aporta
Lola?,debo preguntarme también yo. Esa es una gran pregunta, de modo
que deberéis dejadme pensar...¿Podría ser vitalidad? sí, ella
vitalista como ninguna otra....¿Entusiasmo? diría que es una
chispeante bengala de entusiasmo y no me apartaría un ápice de su
figura. Y yo quisiera reunirla a ella, toda ella, en un solo
sustantivo definitorio. Carisma. Tiene la joven el dominio de la
expresión oral y corporal de forma que te atrapa en su discurso,
probablemente empático en la mayoría de ocasiones.<< Sete, las casualidades no existen,
en cambio sí las causalidades>> —me dice con frecuencia—y
luego argumenta la teoría con uno u otro ejemplo resolutorio.¿No es
maravilloso poder reunirte con alguien así...?Querido lector,
concluiré este retrato certero de la hermosa dama amiga,haciéndote
partícipe del signo que me mueve a dejar estas letras aquí; Un
verdadero sentimiento de gratitud hacia ella por estar en mi vida, y
que migra hacia el cariño sincero.
Setefilla Almenara Jiménez
Déjame tu opinión, gracias.
Sete....Un millón de gracias, de verdad...
ResponderEliminarMe he emocionado hasta las lágrimas...
Gracias, eres Genial. Tienes toda mi admiración, y se que lo sabes...
LOLA
Para mí ha sido muy emotivo también escribir estas letras tan merecidas, amiga.
ResponderEliminarUn abrazo.
Sete
Unas sentidas y precisas líneas para hablar del sentimiento universal
ResponderEliminarde la amistad; cómo no se va a emocionar Lola....
Sete, te felicito por la redacción de este escrito; es una buena muestra de tu evolución como escritora; se me ha hecho corto, como si empiezas a leer una novela y solo está impresa la primera página...
Un besazo fuerte, fuerte.
Esteban muchas gracias. Me gusta que aprecies esa evolución, y sobre todo que se te haya hecho corto, eso es buena señal jeje.Y ya sabes lo que opino, por el momento, sobre escribir una novela...
ResponderEliminarRistra de besos.